Llegaron sin previo aviso!
Primero, una señal en el radar del Monte Palomar. Luego, las naves – elegantes, silenciosas y apodadas "Escorpiones" – surcaron nuestros cielos. De ellas descendieron seres indistinguibles de nosotros, si todos tuviéramos un intelecto de genio y una condición física impecable.
Dijeron que venían en son de paz. Su carismático líder se dirigió a un mundo repentinamente unido por el asombro y la aprensión, hablando ante la ONU no como conquistadores, sino como... ¿viejos amigos? Su filosofía era escalofriantemente clara: la verdadera iluminación significa poseer el poder de aniquilar y elegir la contención. ¿Su misión? Puramente científica, afirmaron. Todo lo que pidieron fue nuestra confianza, nuestra amistad y la libertad para operar. ¿Por cuánto tiempo? No lo dirían.
Para demostrar sus intenciones "pacíficas" y su poder inimaginable, ofrecieron una demostración. Se seleccionó una isla. Ante los ojos del mundo, una única nave Escorpión desató una energía cegadora. Cuando se disipó, la isla simplemente... había desaparecido. Desvanecida.
Siete años después, la Tierra seguía siendo suya si así lo querían. Sin embargo, sin demandas, sin control manifiesto. Solo una presencia inquietante y silenciosa. Una "misión científica" sin final a la vista, sin respuestas. La humanidad existía bajo su vigilancia, un planeta conteniendo la respiración, sintiendo el sutil cambio hacia una autoridad benévola, pero absoluta.
Entonces, el silencio se rompió. Un hombre se aventuró demasiado cerca de su nave dañada, ahora prohibida. Fue encontrado más tarde, convertido en una sombra de sí mismo, su historia personal borrada, dejando solo intelecto puro y susurros fragmentados de "gloria". Bajo hipnosis, el recuerdo completo regresó – y con él, un terror que amenazaba con consumirlo.
Jim Lawrence se ve arrastrado al enigma. Su misión: descubrir qué le sucedió a este hombre y rasgar el velo de secretismo que los Escorpiones han mantenido durante casi una década. Un trabajo imposible, cuando los sujetos son seres que podrían borrar un planeta con un pensamiento.
Esto es más que un primer contacto. Es un viaje al corazón de una civilización alienígena aparentemente perfecta, la horrible verdad que podría ocultar, y la apuesta desesperada que la humanidad debe hacer. Porque a veces, salvar a una raza "superior" de su propia y aterradora enfermedad significa aventurarse en lo desconocido, incluso si eso implica enfrentarse a tus dioses.